Los maxis en 100% Silk y el clásico contemporaneo "Culture Clubs" dispararon el nombre de Daniel Martin-McCormick a la cabeza de un pelotón que reinterpretaba el house y la cultura clubs desde la electrónica progresiva y el amor a los sintes. Cuando se anunció "Hive Mind" en Planet Mu, ya simplemente empezamos a salibar muchos como perros esperando una nueva vuelta de rosca a un universo atractivo y una nueva reinvención de la cultura popular (underground obviamente) desde el ritmo. Hay algo en esa historia musical que marcaba el cambio de estilos como la introducción de nuevos instrumentos a los géneros antiguos, pero en este ámbito la expansión que ofreció la música electrónica con el paso del tiempo ha ido dejando distintos géneros donde el cambio venía determinado por el ritmo.Sin ganas de querer profundizar en lo pantanoso de la perspectiva histórica ni resultar pedante, debo admitir que "Hive Mind" no te destroza la cabeza en sus cinco cortes, pero si la expande.
El disco se abre con "Doesn't Matter (if you love him)" , con la sorna de samplear a Whitney de "El Guardaespaldas", que también nos remite a referentes noventeros. La canción con su pulso de bajos disco y ritmos house se hace querer y "Privacy Settings" añade confusión a un disco completamente soleado.Son las tres hipnóticas raciones de diez minutos donde Martin-McCormick se deja llevar por la abstracción y lo desenfocado de "Culture Clubs" apretando desde la inopia y la repetición de "First Wave" y el dub marciano y exótico de "Israel" se convierte en otra excursión con la bohemia por sombrero. Pero toda esa extrañeza se conjuga en un corte como "Floridian Void" para terminar de rematar la sensación de encanto en este disco, con el color costero penetrando en tu mente e imágenes costeras mientras el ritmo avanza y la progresión en cascada de los sintes se dedica a enjuagar tus oidos sin poder soltarte en su trampa de diez minutos.
"Hive Mind" no busca dejarte sin aliento,no es un amor a primera vista.Pero muchas veces hay victorias que se cocinan a fuego lento, al ir disfrutando de nuevos detalles y poder ir observando que vueles una y otra vez al mismo lugar.Llevos unos días sintiendo que el disco está creciendo en mí así.Dejemos que en primavera y la carretera le den su lugar adecuado.
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