Siguiendo con la escalada de híbridos, llega uno de los discos esperados para este último tramo del año como es el debut del capo de L.I.E.S, Ron Morelli, para Hospital Productions, casa de Dominick Fernow (Prurient/Vatican Shadow). Esta unión y feedback entre dos de los personajes que más tinta están derramando entre diferentes medios especializados tiene como resultado el delirante contenido de "Spit", que sigue con la línea macabra de otras referencias como las de Shapednoise este año, pero llevado a un punto que era difícil de imaginar en Hospital Productions. Está claro, que la imagen que tenía de este sello dedicado al noise / harsh noise y oscurantismos abrasivos diversos ya nada tiene que ver con la actualidad. No es que lo extrañe, me parece una evolución que ha dado muchas alegrías. Supongo que buena parte de esta derivada, tiene que ver con las vivencias de Dominick Fernow durante estos años pariendo un proyecto de tan amplia aceptación como Vatican Shadow y cambiando salas de conciertos (en muchos casos ni entrarían en esa categoría) por una nueva vida en circuítos reservados para el público electrónico. Por desgracia el momento de cristalizar estas vivencias en "Remember Your Black Day" no ha conseguido resultados satisfactorios para muchos. Tal vez, en estos nuevos ámbitos surge el conocer a Ron Morelli. Es una suposición.
De entrada "Spit" no suena a casi nada que se haya publicado en Hospital Productions (excepción de la demo de No Fun Acid), pero mantiene el espíritu originario del sello: oscuridad, intransigencia y peligro. La vinculación de este lenguaje viene estructurado según la trayectoria de Ron Morelli con sus diferentes alias como Two Dogs in a House, Bad News y especialemente U-202, proyecto del que la autoría no es compartida como en los otros dos. Cierto que hay ramalazos house, pero llevado a un terreno más destartalado y errante, sin brillo ni bohemia, tan solo una exploración de los sonidos de los sintetizadores y cajas de ritmos por los que usualmente reconocemos al house. Algo que también sería reconocible bajo el nombre que acuñó una recopilación de su sello: "American Noise". Pero más allá de esa consideración, es un viscoso y mutante artefacto este "Spit". Ya que estamos con el nombre del album y hemos dicho lo de viscoso, debe ser como ese gran escupitajo en el que sacas las flemas atascadas en toda la mañana. Es un disco plano y desconcertante, hijo de la santísima trinidad de Hieroglyphic Being sin duda alguna. Pero al mismo tiempo, ese tono plástico tiene algo de Kassem Mosse, Rabih Beaini y Madteo en "Modern Paranoia", el revoltoso universo de Jamal Moss y Danny Wolfers en "Crack Microbes", la locura circular de Eric Copeland alrededor de "Sledghammer II", el tono ácido y entre tonos de banda sonora de pioneros de la electrónica de "Director Of...", ese nunca acabar de despegar y estar aferrado a la maldad en "Fake Rush" que obviamente recuerda a una versión marciana de aquel "Fakin" de su single como U-202. Para el final, nos encontramos con uno de los cortes más memorables y menos ásperos como es "No Real Reason", que se acerca a los parámetros de su sello con claridad. El cierre con "Slow Down", podría incluso asemejarse al narcoléptico estado de procesión mental que acostumbra a gastarnos Nate Young. Aunque a ciencia cierta, tampoco acaba sonando a nada de eso. Para Morelli, el disco funciona del siguiente modo:
“I’m a regular guy, enjoy a good steak, drinking beer, and occasionally a game of pro basketball, Republican talk radio... you know...all the good stuff.....”
“The music on this record is about immediacy, pressure, monotony and stress. A great deal of the feelings conveyed within come from the fear and repulsion of basic human interaction....like if someone sitting behind you on the plane sneezes on you or being forced to shake the clamy hand of a stranger and the intimate paranoias of the mind and dealing with it or not. Not to make some deep intellectual fuck show of this, as it is not...it’s just stress music...jammed out quick and recorded.”
“Last year, I was staying in an area where all the hookers did their work...all they would do is smoke cigarettes, read the paper, talk on their cell phones, and spit. They would spit...A LOT. I would step in that hooker spit on the way home, often tracking it into the apartment building as I entered. This is where the title of the record comes from."
Ya que la portada hace referencia a prostitutas y sus escupitajos, su música obviamente también estaría conectada con James Donadio y su proyecto Prostitutes, aunque no pretendía hacer este juego de comparaciones, pero estaba a huevo. Música nacida desde sensaciones de monotonía, repulsa y stress. Una nueva forma de expresar la cotidianidad desde la experimentación electrónica de texturas que tienen puntos de conexión con la cultura de baile, pero como si fueran un elemento doméstico que modelar como Stephen Bishop en Basic House. Es como observar el house desde la manipulación sonora de Graham Lambkin, para convertirlo en un experimento que transforma a su música en una categoría desconocida. Respecto a querer experimentar stress, bueno, todos tenemos esos días aunque no se hasta que punto puedo divertirme repetidamente con estas sensaciones. Independientemente de eso, es un más que interesante y atrayente artefacto. " Jack the House with Jason(Voorhees)"