Meteóricamente negro el año del sello de Will Bankhead, The Trilogy Tapes. Recientemente comentaba sus dos últimas referencias con Rezzett y Eomac, pero además tenemos que añadirle a los próximos lanzamientos la metralla degradada y animal de Vereker, un nombre que ya se presentó con dos ep's en L.I.E.S (que reseñé para Concepto, siempre atento con Frankie a estos parajes) mostrando la parte más descarnada del sello al nutrirse de rítmicas oscuras pero siempre con ese tono hipnótico que apunta al trance de Gunnar Haslam, Marcos Cabral, Gobby y tantos otros degenerados. Sentir las punzadas rítmicas con el sonido deforme y lo-fi de la diferente cacharrería empleada. Es la forma de un género abonado a las grandes masas del clubbing a regenerarse desde los infiernos de la mugre, al igual que se buscaba esa escena paralela del lo-fi en el rock indie a finales de los ochenta y principios de los noventa, buscar salir del sonido ampuloso y los estadios donde comulgaban los grandes dinosaurios del rock. Es una manera de liberación en la expresión artística en este movimiento el buscar una reafirmación de tu seña de identidad partiendo de nuevo desde las cenizas y tratar de eliminar los excesos cometidos durante el pasado. Solo basta meterle mano a estos dos cortes que han trascendido (no se si el maxi/ep tendrá alguno más). Liberación de nuevo.
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